Publisher's Synopsis
Quien concibe al hombre como simple animal racional, compuesto de alma (racional y libre) y cuerpo, corre el peligro de presentarle como una especie más; perfectible en sus individuos, dentro del orden moral, pero sin salir de las fronteras de lo humano. La especie como tal hará progresos hacia afuera en las ciencias, en el arte y en la técnica; hacia dentro, en la moral. Pero jamás se supera a sí. No dejará, según esta doctrina de error, que el hombre deje de ser hombre. Degradado quedará el hombre, condenado a su condición de hombre terrenal, a su condición de hombre animal (animado, por tener alma).Dios... nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina. (2P.1:4)