Publisher's Synopsis
Judith sentia que el desprecio era sinonimo de no querer entender, de no querer valorar, de no querer compensar todo lo que hacia una persona por otra. Ahora se daba cuenta de que habia estado completamente ciega, de que su ser habia sido extranamente atraido y no comprendia nada. Ahora se sentia extrana en lo mas hondo de su ser... Primero habia sido Alex, luego, Evo, luego su amiga Noemia. Tampoco habia podido hablar de esto con su madre... Judith ya no intentaria superarse a si misma, ni agradarse a si misma, habia terminado con su autoestima. "Cuando te amaban tu te convertias en la persona que todo lo hacia siempre bien. Lo cierto es que me pude fiar pero solo hasta que volvi a darme el batacazo y este ya fue descomunal." Judith sabe y se da cuenta ahora de que el verdadero control emocional implicaba la flexibilidad de adaptarse a la situacion y al entorno. El verdadero control emocional es tener una capacidad muy grande de resistencia y de resiliencia. Es precisamente lo que ahora trataba de hacer con su vida. Habiendo de perder el miedo a sufrir o a sentir algo, tenemos que reconocer que estas son las cosas que nos hacen sentir vivos y de las que realmente necesitamos alimentarnos. Si caemos, siempre tenemos la oportunidad de volver a levantarnos. Nuestro cerebro esta programado para sobrevivir y, por eso, necesita ante todo seguridad, lo que mas le asusta es la falta de seguridad. Judith cree que ahi es donde podemos llegar a confundir la lealtad con la fidelidad. Que realmente muy a menudo incluso no deberiamos separarlas.