Publisher's Synopsis
¿Puede un dragón sentir soledad? Claro que sí, especialmente cuando no puede ver a creaturas que le acompañan con su canto y de repente, deja de escucharos y se queda solo en el silencio. Éste cuento habla de tal dragón y la jornada que emprende en la búsqueda de esas creaturas.
No siempre es fácil usar anteojos en una sociedad en donde se admira la perfección y se critica la imperfección. Usar anteojos se considera una debilidad y hasta los superhéroes sólo los usan como un disfraz, haciéndose pasar como un cohibido y debilucho totalmente opuesto al superhéroe. Cómo una persona que ha sentido la marginación de la sociedad por tener vista débil, decidí que los niños necesitan un héroe que usa anteojos al cual pueden admirar. Hasta los grandes dragones, feroces y imponentes pueden tener vista débil. Espero que este cuento llene de autoestima a algún chico o chica que usa anteojos y que encuentre en este dragón, un nuevo héroe.
