Publisher's Synopsis
La preocupación por el discurso moral de la cinematografía nació con las primeras luces del Séptimo Arte. La consecución de la moralidad en el cine ha estado ligada más bien a intereses ideológicos y políticos de una minoría en lugar de atender las necesidades reales de la gran mayoría. En este camino, el empleo del cine de género religioso ha sido una constante. Bien es cierto que en ocasiones el celo de estos sectores por introducir la moralidad en el cine ha estado acertada en relación con la denuncia de vicios o lacras sociales planteando algún tipo de respuesta, aunque se realizara de manera simple y sin profundizar en cuestiones científicas o sociológicas. No obstante, cuando se ha intentado imponer una moral relacionada con formas de poder que coartan la libertad se ha caído más en la implantación de una moralina, fruto de los miedos y temores de alguna mente atormentada por sus propias frustraciones, que de ofrecer algún beneficio a la colectividad.
