Publisher's Synopsis
El emperador Vespasiano, segun Suetonio, invento lo de cobrar por mear: un impuesto, el crisagiro, sobre las inmundicias. Pecunia non olet era su lema. Siguiendo el ejemplo romano, todas las ciudades han tratado de resolver el problema de los meones callejeros a su manera; Paris lo hizo con las vespasiennes, en honor al emperador. Las habia de muchos estilos, siendo la mas famosa -y solicitada- la redonda de tres plazas. Y digo solicitada porque pronto se convirtieron en el coto de caza al homosexual. Por muy escatologico que parezca, de ellas salio el amor muchas veces en una epoca en que no resultaba tan facil ligar como ahora."