Publisher's Synopsis
Casi todos los días, desde las pantallas de televisión y vallas publicitarias, nos imponen la imagen de una figura ideal (yo diría incluso que zombi). Siluetas esbeltas, figuras cinceladas, vientre plano y, por supuesto, una altura de al menos 176 cm, esto es lo que la publicidad nos presenta como la imagen de una glamorosa doncella del siglo XXI. ¿Y los que tienen menos altura y menos forma y están lejos de 90-60-90? No te aconsejo que desesperes y suspires en vano. Primero, tanto la fotografía como la televisión tienen una enorme capacidad de retoque. En segundo lugar, no vas a ganar dinero con tu cuerpo. En tercer lugar, muchas de las estrellas de la pasarela del mundo tienen figuras diseñadas genéticamente o son el resultado de restricciones muy estrictas y trabajo duro