Publisher's Synopsis
Corría el año de 1554 y el emperador Carlos I, había convertido a Toledo en capital de su imperio, el cual abarcaba gran parte del Continente Americano, el Sacro Imperio Romano Germánico, los reinos de España, Nápoles, Sicilia, Cerdeña, Borgoña y los Países Bajos, en fin, Carlos I era emperador de gran parte del mundo conocido en ese tiempo. España era la joya de la corona, a la cual fluía en abundancia la riqueza del mundo entero. Sin embargo, la sociedad española estaba llena de prejuicios religiosos y era totalmente estratificada; la movilidad social y la distribución de la riqueza prácticamente no existían. Los nobles y los hidalgos vivían de sus rentas y el trabajo productivo era visto con desdén por los poseedores de la riqueza. Sin darse cuenta, los españoles transferían su riqueza a Francia e Inglaterra. Con el oro que se extraía de las Colonias y de los impuestos que se recolectaban en el resto del imperio, compraban buena parte de lo que en España se consumía. Mientras Inglaterra y Francia empezaban a crear industrias y trabajos productivos, el pueblo español vivía en una oculta pobreza.Muchos de los españoles que no habían tenido la fortuna de nacer en el círculo de los poseedores de la riqueza, para sobrevivir, se dedicaban a empleos como en los que nuestro Lazarillo de Tormes trabajó y tenían que ser ingeniosos y pícaros como él. El autor de esta irónica, cómica y despiadada narración nos habla de la sociedad española de ese momento, mostrándonos crudamente sus vicios e hipocresías, sobre todo las de los clérigos y religiosos. El Lazarillo de Tormes fue prohibida por la Inquisición. La obra volvió a ser publicada íntegramente hasta el siglo XIX.José René Cruz revueltas