Publisher's Synopsis
Hoy, como ya había ocurrido en Nietzsche, la filosofía parece un discurso negador de la edad científica. La verdad es que Nietzsche medió entre un reduccionismo naturalista y una crítica total a la razón, en concreto la razón del posmodernismo, lo que le hizo valer su anticientificismo. Pero ya se aceptaba con frecuencia la autocontradicción performativa de la argumentación, es decir, el poder girar tu argumentación hacia dos sentidos contradictorios y ambos poder ser válidos, y aún se cultivaba como medio de expresión del filosofar. Y no responde, como otras veces se ha dicho al cultivo de la Escolástica, a un discurso transcultural y profundamente negador de la edad científica. Tanto en Heidegger como en Derrida, el tiempo, en tanto que potencia de la formación de la diferencia, consigue en cierto modo la victoria final frente al logos, el cual, no obstante, es capaz de enunciar esto mismo. Estamos ante una completa inversión de la idea que definió los comienzos de la metafísica occidental en Parménides y Platón. El que en virtud del logos podamos pensar el tiempo, y enunciar y comunicar lo pensado ―con pretensión de validez intersubjetiva―, ya no parece ser lo asombroso; incluso no se reflexiona sobre ello en cuanto inevitable pretensión de validez. Lo principal del concepto Kuhniano de paradigma ―lo que resulta provocativo para la representación tradicional del progreso lineal de la ciencia y de su racionalidad unificada― se alinea, en esa medida, junto a la sugerencia de Wittgenstein de que no es posible retroceder más allá de la pluralidad y la diversidad de los juegos del lenguaje y de las formas de vida que los sustentan, y de que, por lo tanto, hay que contar con que la diversidad de las formas de vida, en cuanto trasfondo de los diversos juegos de lenguaje, puede imposibilitar el entendimiento comunicativo por medio del lenguaje. (De tal modo que nosotros los hombres no podríamos entender, por ejemplo, a los leones, si es que ellos pudieran hablar. Y es lógico suponer una limitación semejante de la comprensión también a la hora de entender formas de vida humana extrañas ―por ejemplo, las así llamadas culturas primitivas). _Capítulo 1 Las fuerzas reactivas del mal_Capítulo 2 La mala conciencia_Capítulo 3 El filósofo de la sinceridad_Capítulo 4 La existencia de los valores_Capítulo 5 El tema de la legitimación universal_Capítulo 6 El mito del eterno retorno_Capítulo 7 La conciencia metafísica_Capítulo 8 La filosofía como diálogo_Capítulo 9 John Rawls, la concepción de la justicia_Capítulo 10 La conciencia de culpa_Capítulo 11 El poder y el tema de la sublimación de poder_Capítulo 12 La filosofía de la vida cotidiana_Capítulo 13 La ventaja de nacer mujer_Capítulo 14 El hombre debe pagar un precio en inhibición cultural_Capítulo 15 La empatía y el amor a la humanidad_ESTHER LLULL es autora de diversos libros y ensayos, entre ellos, La crisis del euro, Durante este siglo escasamente utópico, El hombre mágico, Danés para principiantes, El amante copernicano, La amante Sumeria, y sigue una trayectoria continua. Estudió derecho, hizo un postgrado en Filosofía, moral y política, y también ha estudiado Astrología y astro mundial. Ahora vive entre Sevilla y Copenhague. estherllull.com